Prueba de alucinógenos, utilizados por los chamanes andinos hace más de 1000 años, se encontraron en una bolsa de cuero.
Publicado en “La Conceria” – 10 de Junio de 2019
Cuando los investigadores de la Universidad de Penn State miraron el artefacto por primera vez, pensaron que era un mocasín de cuero.
La cueva ubicada en los Andes de Bolivia estaba siendo estudiada por investigadores, ya que era la ubicación de un antiguo sepulcro saqueado durante varios siglos por los ladrones de tumbas que buscaban objetos funerarios, dejando solo objetos de poco valor.
Los académicos de la universidad estadounidense entendieron más adelante, que este accesorio de cuero era en realidad una bolsa. El saco contenía las herramientas de un chamán, como espátulas de hueso, pequeñas pipas y una bolsa hecha de tres hocicos de zorro ensamblados juntos.
Mientras que el análisis de radiocarbono permitió a los estudiosos fechar los objetos entre 900 y 1170, el químico les mostró el contenido de la bolsa, que es lo que hizo que este descubrimiento saltara de bueno a excelente. Resume National Geographic que el bolso del chamán contenía, varias sustancias psicoactivas diferentes, incluídas las que se usan para hacer ayahuasca: la bolsa podría ser la primera información, valiosa aunque no resuelta, hasta la fecha del consumo de la bebida alucinógena en América del Sur.