Editorial N°116
Siempre me resulta difícil escribir esta parte de la revista, será por eso que la dejo para el final, cuando todo el resto está listo .
La redacción no es mi fuerte, por algo será que estudié Química, una Ciencia Exacta en la que los números, fórmulas y ecuaciones hablan por si mismas. No necesitan que revisemos la redacción, la puntuación ni que les les agreguemos emociones o sentimientos.
Escribir una editorial es diferente. En parte es contar una historia.
Llegamos a fin de este 2023 difícil y complicado, no muy distinto a tantos años que hemos pasado en nuestro bendito país y un ciclo se cierra.
Lamentablemente, por distintas circunstancias, no tuvimos muchas actividades en AAQTIC, pero sí cumplimos con el objetivo de publicar los cuatro números de Tecnología del Cuero.
Hacer el balance al final de un ciclo no es un trabajo sencillo: es demasiado lo que queda como pendiente de realizarse aunque el esfuerzo y el compromiso de los que formamos la Comisión Directiva de AAQTIC haya sido importante.
Cuando pensaba qué escribir en esta Editorial, aún sin quererlo, hice un viaje al pasado, a mis inicios en la Comisión de Revista colaborando como novata con la querida Dra. Lucía Fernández Crespo y el Dr. Esteban Tzicas.
La revista de AAQTIC en esos días, tenían un formato pequeño, era en papel, impresa en blanco y negro, excepto las tapas que eran a color y la editaba Palombo, al que perseguíamos para que cumpliera con las fechas aunque los que nos atrasábamos en enviarle el material éramos nosotros.
Pasaron unos años y quien tomó la posta como editor fue Mauricio Herzovich. La revista en ese entonces, pasó a ser más profesional, a todo color, con más y mejor contenido, esto ayudado por un momento de auge de la industria curtidora argentina y de las empresas proveedoras que estaban radicadas en el país y que siempre nos apoyaron con publicidad.
Este nivel de excelencia que había alcanzado Tecnología del Cuero, se mantuvo y potenció durante el tiempo en que Claudio Salvador la tuvo a su cargo. La distribuíamos por correo no solo dentro de Argentina sino a varios países latinoamericanos y algunos europeos.
Lamentablemente, luego hubo que hacer frente a la realidad, analizar con profundidad los costos y los recursos con que contaba AAQTIC, cada vez más escasos y la revista pasó a ser digital, esforzándonos por mantener el nivel que había alcanzado.
Trabajamos mucho con Jorge Vergara, con Victor Vera, incondicional colaborador de CITEC,con Barna que se encargaba de las traducciones y tantos otros, que aunque no los nombre, forman parte de la historia de Tecnología del Cuero .
Más tarde se unió a la Comisión de Revista el querido y recordado José Stella, que tristemente nos dejó durante la pandemia.
Muchas veces, cuando la revista estaba casi lista, la revisábamos y sentíamos un cierto grado de desilusión, nos parecía que no estaba completa…Tal vez nos costaba reconocernos que habíamos hecho lo mejor que podíamos, “todo a pulmón“ como dice la canción, con mucho cariño y compromiso con nuestros lectores.
Cerrar ciclos tiene que ver con reconocer que una etapa ha llegado a su fin.
Pero no es fácil hacerlo, más aún cuando las emociones y los sentimientos se nos agolpan en el corazón y la garganta .
Por eso pensé que repasar, a paso a paso, aunque fuera a vuelo de pájaro la historia de la Revista de AAQTIC, nos ayudaría en este proceso.
Como Presidente de AAQTIC y como integrante de la Comisión de Revista quiero agradecer a nuestros socios, socios protectores, anunciantes, revistas y publicaciones colegas que nos permiten compartir su material, la confianza depositada y el apoyo que nos brindaron durante muchos años.
Les deseo en nombre de todos los integrantes de la Comisión Directiva de AAQTIC, una Feliz Navidad y un próspero año 2024.
Lic. Patricia Casey.