Mesa redonda Sustentabilidad en la industria del cuero y su cadena de valor.
Participantes: Ing. Jorge Garda (Curt. Fonseca); Alvaro Flores (Brasil), Gustavo Defeo, Ulrich Buckenmeyer (Trumpler) y Alejandro Maffei (Curtiembre Arena).
Compartimos con ustedes las ediciones de las presentaciones que hicieron los participantes de la mesa redonda que tuvo lugar el primer día de la Jornada de Innovación y Sustentabilidad en la Industria del Cuero, realizada en Buenos Aires, en Noviembre 2019, en la sede de la Cámara de la Industria del Calzado.
Alejandro Maffei (Curtiembre Arena)
“Voy a tratar de dar una visión un poquito menos técnica ya que yo me dedico a lo que es principalmente la comercialización, o sea yo tengo trato directo con el diseñador, todos los días y todo el tiempo. Vivo de eso y lo que veo puntualmente son dos cosas: creo que en los últimos dos años lo que es el aspecto ambiental pasó quizás a un segundo plano aunque sigue siendo muy importante pero hoy lo más importante que ocurre es que cuando decís “cuero vacuno” lo primero que te dicen es “asesino de animales”. Entonces hay que separar por un lado que usamos un subproducto, que lo que hacemos nosotros no es matar animales directamente por las pieles, sino que nosotros recuperamos algo que se tiraría. Entonces vivimos de un subproducto. Todo eso es tratar de ver no como diferenciarnos, sino cómo hacemos público esto. No tenemos llegada al consumidor como la tiene la gente vegana. Cuando te dicen “cuero vegano”, “cuero ecológico” y de repente te encontrás con que es un material sintético. Justamente en los últimos 100 años aumentó casi el 95% o más la presencia de plásticos en las aguas del mundo y todavía no sabemos qué va a causar todo eso. Entonces cómo vamos a decir “cuero vegano”, “cuero ecológico”, tenemos que poder diferenciar lo que es cuero genuino del resto de los materiales y de ahí arrancar. Todos saben cuáles son las cualidades diferenciadas del cuero: no es igualable a nada, es un material único. El plástico no lo suplanta, lo hace algo similar, entonces desde mi punto de vista tendríamos que tener un poquito más de fuerza de imagen de comunicación. Yo desde mi lado, con cada colega que me voy cruzando dentro del área comercial, trato de enfocarme en eso: eduquemos al cliente, expliquémosle lo que hacemos, como se diferencian otros materiales sustitutos del cuero. Y veamos por otro lado cómo nos unimos los que formamos toda la cadena de valor para marcar esas diferencias, porque la competencia que hoy tenemos principalmente es esa, un producto más barato , más contaminante pero con mejor publicidad que el cuero . Lo que quizás en mi corta historia en mi relación con el cuero, es que nunca hubo en la Argentina, como sí hay en Italia una bajada de línea única con el cuero. En Argentina siempre fueron todos por diferentes caminos, nadie se ponía de acuerdo, y mientras tanto veíamos como el plástico nos pasaba por arriba. Entonces lo que veo en el último tiempo, especialmente en los últimos dos años es que se hizo mucho más fuerte el tema del veganismo y el tema de poner al cuero como “el malo de todo esto”. Por eso sería bueno mejorar la comunicación, educar al cliente, y trabajar fuerte con el diseñador, con el que es el final de la cadena y el principal encargado de explicarle a la gente esto: decir de dónde viene el producto, armar una trazabilidad, una cadena de valor conjunta. Trabajemos todos en un método sustentable desde el feedlot. En los últimos años lo que ha quedado del rubro curtidor está trabajando mucho mejor que antes, no podemos hablar de curtiembres hoy haciendo referencia a lo que pasaba hace 100 años cuando que ibas a Valentín Alsina y se vería correr sebo por las calles. Hoy ya no es lo mismo, pero la gente sigue con una mala imagen nuestra y si no podemos hacer un cambio en eso, va a ser muy difícil y podemos llegar a la extinción porque cosas como el “cuero vegano“ que sabemos que no está hecho de lechugas, pero todos lo ven como que es algo natural, nos está pasando por arriba.
El otro día paso caminando y veo una tapicería donde se exhibía un sillón y veo un muestrario que al parecer era cuero, tenía una forma parecida a la del cuero. Entré para “pispear” porque me interesa ver qué hay en el mercado y me encuentro con que era plástico, y lo venden con la forma del cuero! Entonces habría que ver cómo tener algún tipo de certificación o de logo que nos diferencie o al menos tener la posibilidad de decir, no puede tener la forma del cuero, no puede decir cuero porque no es cuero.
Alvaro Flores (CICB Brasil)
Me gustaría reforzar dos cosas no solamente en referencia a la certificación, que traté en mi presentación, sino respecto a todo lo que se dice respecto a sostenibilidad.
En primer lugar, la importancia de generar una articulación de un movimiento de todos los participantes de la cadena de valor del cuero, no solamente hacia atrás, con los frigoríficos, sino hacia adelante, principalmente con los confeccionadores de calzado, marroquinería, tapicería automotriz y otros. Porque estos son nuestros clientes que tienen contacto directo con el consumidor final; nosotros podemos hacer los mejores cueros, con las mejores tecnologías, con el menor impacto ambiental, pero si nuestro comprador, por ejemplo un fabricante de zapatos, no trasmite este atributo al consumidor final, de nada vale todo nuestro esfuerzo. Entonces se debe trabajar junto con el cliente, para que se pueda realmente hacer saber al consumidor final, que es el gran motor de toda la cadena de fortalecimiento ya que es el que paga todos los insumos, los procesos, los productos químicos, la materia prima. Es muy importante tener este enlace: cliente con las curtiembres.
La experiencia que vivimos en Brasil es que, desde que se empezó a solicitar a los proveedores de cuero que lograran la certificación, esta situación dio un impulso muy grande a todo el proceso.
El segundo punto es que también necesitamos empezar a dar una atención muy especial a la dimensión social de la sostenibilidad. Se habla mucho de los aspectos ambientales, pero los aspectos sociales son tan importantes como los ambientales. En Brasil las curtiembres ya estaban en un buen nivel de cumplimiento de las cuestiones sociales, empezando por las que están relacionadas con el desempeño de los trabajadores, el liderazgo dentro de la curtiembre, las condiciones laborales, las cuestiones del ambiente de trabajo que también son demandas del comprador final, que no haya trabajo infantil, trabajo esclavo, todo eso hace a una curtiembre sustentable.
Ulrich Buckenmeyer (Trumpler)
Voy a separar dos cosas: por un lado están las compañías químicas que tienen que trabajar en toda la parte de sustentabilidad y que es un universo diferente al de la curtiembre y por la otra, promover las buenas propiedades del cuero, algo más general donde toda la industria, no solo la curtiembre sino también empresas químicas, diseñadores, todos tienen que trabajar hacia ese objetivo. En las empresas químicas, y en particular lo que se está haciendo en Trumpler desde hace muchos años, es usar materias primas renovables. En materia de aceites, por ejemplo se usa como materia prima aceite de colza, que es una oleaginosa que se planta mucho en Alemania y la mayoría va al biodiesel, aceite de pescado, hoy trabajamos con residuos de la cría del salmón que no son comestibles para el hombre y que a nosotros nos sirve. Hay otras materias primas naturales que hoy ya se están usando y se está trabajando hacia eso para ampliar la gama de productos.
En el caso de los recurtientes, hace muchos años Trumpler comenzó a usar la viruta del cuero de la rebajadora, separando el cromo de la proteína y con el hidrolizado formula productos que hoy ya se están vendiendo con mucho éxito en el mercado. Entonces el cuero vuelve al cuero, eso ya es un paso importante.
Otro ejemplo sobre los trabajos que se están haciendo en Trumpler es estudiar, la demanda química de oxígeno. Hace unos años atrás, se hizo un estudio sobre todos los productos que provee la empresa, tanto para recurtido, es decir recurtientes, como aceites y otros productos. Hoy podemos decir que tal producto X nos demanda tanto oxígeno en el agua residual y aplicado en el cuero, no solamente el producto en sí, sino cuál será la demanda química de oxígeno en cierta cantidad de producto, eso nos permite trabajar ya hacia productos que den una baja demanda química de oxígeno. Otro ejemplo es que a todos los productos que salen de Trumpler, se les hace el test de demanda biológica de oxígeno. Entonces hoy podemos decir que prácticamente conocemos la demanda biológica de oxígeno de todos los productos puros. Con esos resultados, podemos decir que la mayoría es fácilmente biodegradable, quiere decir que se degrada más de un 60% dentro de 10 días y el resto después de 28 días. No tengo en este momento el número exacto, pero alrededor del 80% de los productos que hoy ofrece Trumpler, para aceites y recurtientes, es fácilmente biodegradable.
Hay un trabajo constante de ahorro de energía, por ejemplo en la oxidación de aceites, y eso sería en la parte de la producción. También trabajamos sobre la aplicación técnica, diseñando procesos más cortos para reducir el impacto ambiental, reducir el consumo de agua agua, reducir la oferta de productos químicos.
Hace unos meses alguien en Trumpler, mandó un mail a los Técnicos diciéndoles que tenían que pensar qué innovación se podía implementar para que se venda mejor el cuero en sí. Yo pensé que ya se hizo todo con el cuero: se lo tapó con laca, se hizo cualquier cosa y la moda vuelve cada 5 años. Pensé que nadie habla de las buenas propiedades que tiene un cuero. Por ejemplo un zapato de cuero: ustedes se lo ponen a la mañana, durante el día como tienen que estar parados, el volumen del pie aumenta más o menos un 10% y el zapato de cuero acompaña eso. Prueben hacer eso con un zapato de goma. Al otro día el zapato de cuero volvió a su tamaño inicial y el pie entra cómodamente.
Otra cosa importante es la tarea de los diseñadores y lo vi en el grupo Ecco en Holanda, Ecco es una empresa grande de calzado en Europa, tienen curtiembre y en 2019 hicieron y es público, un evento de 4 días al que invitaron a los diseñadores de diferentes ambientes. Había diseñadores de Apple, gente de la casa de lujo de Francia, etc. Les dieron cuero, pintura, en grupos y siempre con un técnico acompañando, para que crearan. Los diseñadores tenían el cuero en la mano y hacían muchas cosas con él. Y esa es una muy buena idea porque los diseñadores son el link entre las curtiembres y las fábricas de marroquinería, de vestimenta y todo eso, si ellos nunca tocan un material, nunca lo van a usar. Cuesta dinero sí, pero en la relación de lo que nosotros estamos perdiendo en el mercado ahora no cuesta nada.
Gustavo Defeo ( FSLTC)
Diría que en este punto en que me toca hablar, casi fue todo dicho, pero voy a contarles un poco la experiencia en Italia y que hay que aceptar, que en esto es líder, y por qué?: porque hay muchísimo diálogo. Por un lado las plantas de efluentes que tenemos en Toscana fueron creadas por los curtidores mismos, es decir se hicieron los grupos de trabajo donde desarrollaron estas tecnologías con tiempo. Al principio no era nada maravilloso, de hecho recuerdo cuando llegué a Italia hace 26 años, se bajaba de la colina y no se respiraba más, ahora ya se respira; el ambiente ha cambiado muchísimo. Se ha trabajado en utilizar los subproductos, como las rebajaduras de cuero ya tratadas, se recupera el cromo en plantas como Eco Espansso, que es una planta que genera de estos barros un material para construcción. Porqué? porque 26 años atrás, las usaban para rellenar campos pero llegó un momento en que la región dijo basta.
Aparte de esto creo que es importante el diálogo en el sector, hay distintas instituciones en Italia que trabajan en forma muy unida entre ellas, desde la Asociación AICC que es la Asociación de Químicos del Cuero, UNIC que es la Unión de Curtiembres Italianas y la Cámara Nacional de la Moda Italiana. En realidad cada una de estas instituciones tienen grupos de trabajo, grupos que se intercambian sus miembros. Por ejemplo yo constantemente voy a la Cámara de la Moda a hablar con ellos sobre problemas de Cuero, de cómo estudiar las mejores tecnologías que podemos aplicar, cómo estudiar estos problemas de los que hablábamos antes, la interacción entre los materiales que ellos pueden no considerar y que a veces, cuando surgen problemas, luego le echan la culpa siempre al cuero de ser el que contamina.
Unic tiene muchísimas iniciativas para encarar los problemas y hacer acuerdos con las Universidades para estudiar cada problema específico. Por ejemplo ahora tenemos un proyecto que se llama CALM, porque encontramos por parte de algunas firmas una voracidad hacia el cuero “metal free” como solución a todos los problemas ecológicos y sabemos que no es así. Quien está en el tema y quien ha estudiado particularmente esto sabe que hacer un cuero “metal free” no necesariamente implica que será más sustentable, por eso estamos buscando demostrarlo científicamente. En este momento tenemos un problema que se está agravando respecto del cromo hexavalente. Hace unos meses tuvimos una reunión en Bruselas donde nos exigieron que el valor, o sea el límite nuevo del cromo hexavalente debe ser inferior a 1ppm y sabemos que los métodos no son correctos. Yo como analista estoy convencido que el Cr6+ lo generamos en buena parte cuando se prepara la muestra durante el análisis, estamos estudiando también en la Universidad de Milán, métodos alternativos para estudiar el Cr6+ para demostrar si realmente está o no está presente en el cuero.
Volviendo a la cuestión de si son adecuados o no los pelambres enzimáticos, creo que tal vez por presión del mercado de Arzignano tuvo que convertirse, no totalmente a un pelambre enzimáticos pero sí a un pelambre donde se utiliza máximo 0,5 o 0,8 % de sulfuros y donde ya el sulfuro no es tanto un problema porque basta una pequeña oxidación para eliminarlo. En una planta hicimos un estudio de ciertas bacterias que pueden digerir los sulfatos que vienen de los sulfuros oxidados y donde el sulfato se baja un 30 o 35% o sea hay muchas prácticas y muchas cosas que se pueden hacer todavía, tal vez sin llegar a un extremo de pelambre sin sulfuros. Por años creo que muchos de ustedes me habrán escuchado hablar de pelambres oxidativos, lo llevé al extremo en una curtiembre en Arzignano. Lo hacemos cada día, unas 12 toneladas de pieles siempre para ciertos artículos. Nunca entró en producción por una cuestión de costos porque al final se demostró que es un poco más caro por un problema de desarrollo de temperaturas. Trabajando con un método enzimático logramos reducir el COD de 90000 a 20000 mil, cuando ya el sulfuro lo hemos llevado o un 0,6 o 0,7% máximo entonces es mucho más manejable, creo que no tiene mucho sentido estar pensando en otras cosas, ya que es una cantidad de sulfuro que se puede tratar más fácilmente.
Voy a comentarles sobre mi actividad docente en Polimoda: allí tenemos una gran interacción entre la Curtiembre, el Instituto y un Instituto creó Polimoda como escuela de Marroquinería. En este momento se dan cursos de Tecnología del Cuero. Yo doy 2 cursos: uno que se llama “Ciencia y sensibilidad del color” donde explico todas las consideraciones que debemos tener hacia el color y el diseño y luego un curso de “Tecnología del Cuero para diseñadores”, y esto es fundamental ya que al final de este curso, les hago hacer dos viajes a la zona de las curtiembres en Santa Croce, que está muy cerca. Recorremos las curtiembres, les explico el proceso en vivo y he tenido el privilegio de escuchar decir a algunos de mis alumnos diseñadores “sería interesantísimo trabajar en una curtiembre” y ya para mi eso fue “el sumun“ de lo que podía obtener.
Ing Jorge Garda – Curtiembres Fonseca
Hace varios años que estoy trabajando a favor de la sustentabilidad y tratando de ir convenciendo gente, porque creo que es la única manera que hay de que la Industria del Cuero pueda permanecer y seguir trabajando bien, y lo que se me ocurrió es empezar hoy con un tema que considero está directamente relacionado y es las bajas en las demandas del cuero que se están produciendo en todo el mundo. En esta situación, tienen muchísimo que ver las posiciones de los veganos y las ONG verdes que tienen su posición en muchos casos con su razón y yo creo que con las ONG ecológicas tenemos una deuda, hay que empezar a trabajar con ellas, empezar a compartir las cosas y discutirlas desde adentro. Nosotros tenemos la capacidad técnica que ellos no tienen, es preciso que nos metamos en el tema, si no seguimos perdiendo. Otra cosa que es importante en el reposicionamiento del cuero como un producto sustentable, agradable, hermoso, durable y una serie de cosas que ninguna de los sustitutos pudo modificar; hay que recalcar que trabajamos con un subproducto de la Industria frigorífica, que es un material totalmente renovable, que es resistente, respirable, más durable que cualquiera de los sustitutos, y mucho más ecológico que muchos de ellos.
Pero para eso yo creo que tenemos que trabajar con toda la cadena del cuero, que es importantísimo que los diseñadores participen de esta parte porque un cuero en el que es usado solo el crupon y el resto no, si nos avisan con tiempo el resto va a gelatina. Mientras no curtí el cuero, es fácil de tratar y hay que poder tomar esas decisiones con tiempo, con información adecuada, y la información adecuada viene de que nos pongamos todos de acuerdo. No podemos hacer investigaciones cada uno por su lado; tenemos, que hacer estos congresos o encuentros 10 por año si hace falta, pero tenemos que ponernos de acuerdo de lo que estamos diciendo y de los avances. Finalmente creo que hay que analizar el ciclo de vida dentro de una economía circular. Hoy todo el mundo habla de una economía circular, hoy todo el mundo quiere no tener residuos, y en las curtiembres si hacemos las cosas bien quizás podamos no tener residuos.
Otro de los temas es que hay que integrar hacia el campo y hacia los productos, porque en el campo empieza la calidad de nuestros cueros, entonces creo que hay que volver a tener presión sobre la gente para que haya menos Feedlot y haya más vacas comiendo pasto. Hay métodos como el Voisin qué es un método adecuado porque tiene muy buenos rendimientos sin que haya que usar granos para el alimento de los animales. Hay un gran movimiento en contra de la ganadería que dice que los gases de efecto invernadero que genera la ganadería son importantes, pero no, se producen si se cría el ganado en Feedlot; si se cría en campo no se produce.
Creo que hay que insistir en que el campo introduzca todas las mejoras tecnológicas existentes , porque hay que dejarse de embromar con los alambres de púa, con las moscas de los cuernos y con la marca de fuego y hay que exigirle al ganadero que nos entregue la materia prima en buenas condiciones.
Posteriormente viene el tema de los frigoríficos: creo que los frigoríficos como el cuero era un material escaso hacían cualquier cosa, pero ahora los frigoríficos no saben qué hacer con sus cueros y nos piden por favor que se los llevemos gratis. Los frigoríficos deberían participar en el tratamiento y la preparación de las pieles ya que una piel que es sacada después de haber sido faenado el animal y está colgada de la noria es fácil de recortar. Si además le ponemos una trinchadora es fácil de trinchar y si después se lo pone en un tacho con frío no les va a costar lo mismo que una curtiembre. Los frigoríficos podrían entregar los cueros a 5 Cy las curtiembres tendrían 2 días para clasificar, mirar y hacer lo que queramos sin que ese cuero se eche a perder. Creo que además, si ese frigorífico toma en cuenta que con el trinchado puede hacer sebo y ganar un par de dólares por cuero y que con ese trinchado puede hacer proteína y puede recuperar otros 50 centavos de dólar mejorará el precio de venta del cuero y fundamentalmente abaratará el transporte de ese cuero porque a pesar 30 o 35% menos. El transporte del cuero va a generar una huella de carbono mucho menor, por esto creo que los frigoríficos también tienen que integrarse.
La idea mía es que el proceso en el frigorífico debería ser además de la faena, incorporar un mejor recorte, trinchar las pieles separar la garra para rendering, y enfriar el cuero es un proceso muy chico de baja inversión, que mejoraría la rentabilidad del frigorífico.
En las curtiembres, cuando la piel todavía no es cuero, hay muchas posibilidades de recuperarlas a un bajo costo.
Sigamos con el tema de los cueros salados: yo trataría de no salar todas las veces que pueda. Si tengo cuero salado habría que hacer un circuito muy chiquito, cerrado, donde primero mecánicamente le saquemos la sal, después le hagamos un primer remojo con muy poca cantidad de agua, y que esa agua recircule. Como los cueros se van a llevar parte del agua, habrá que agregar agua fresca y se va a llegar a un equilibrio. Entonces vamos a tener un cuero entrando al proceso con poca sal y sin que nos veamos obligados a hacer grandes tratamientos. Hoy un tratamiento de efluentes de membrana no es tan caro si las cantidades que hay que tratar son chicas.
Reuso del agua
No estamos re usando el agua y el efluente de la planta de tratamiento es casi agua. Tiene un poco alto el tenor salino y suele tener alguna bacteria flotando cuando a uno le falla el proceso, pero no tiene otra cosa o sea que se puede re acondicionar para usar. Si en el pelambre se agrega sal para evitar el hinchado por qué no usar ese líquido en lugar de agua para pelar. Este no es un tema mío, yo soy químico, este es tema para los técnicos. Es importante hacer algo en esta materia porque la nueva ley en Argentina va a tener en cuenta las cargas másicas de la descarga, y si se tiene en cuenta la carga másica de la descarga nosotros que volcamos millones de litros de agua multiplicado por las concentraciones, no vamos a poder trabajar porque lo que tengamos que pagar va a ser tremendo.
Otro tema del que escuché hablar en esta Jornada es el de los pelambres enzimáticos, que me parecen bárbaro, pero yo hasta ahora no encontré ningún curtidor que se anime a ponerlos en práctica, porque se le aflojan los cueros. En general empiezan con enzimas y terminan con sulfuros. Los sulfuros hay que reciclarlos, primero gastamos menos agua y gastando menos agua vamos a gastar menos sulfuro, y vamos a aprender, que no estamos peleando con agua limpia sino que estamos pelando con eso que se recicla y que también sirve.
Después en la curtiembre creo que hay que hacer cambios de lay–out: el proceso llega hasta el piquelado, lo corto y bajo los cueros, y físicamente , en otro lugar, hago el curtido, el neutralizado y sigo con todo el recurtido. En esas condiciones los barros con cromo que a mi me cuesta disponer porque tienen un límite bastante importante, se transforman en el 20% del total. Todo el resto de los barros no van a tener cromo, y si hicimos el tratamiento de los sulfuros tampoco van a tener sulfuro, es decir que va a llegar a la planta de tratamiento un material sin cromo, sin sulfuro qué va a producir barros capaces de ser dispuestos en suelo y respetando todas las normas.
En la foto hice todo un proceso hasta el piquelado y me aparecen dos lugares complejos: la garra encalada y las grasas y sólidos que se separan en el proceso. Todo lo que se separa en los equiposDaf e Iafque separamos por flotación grasas y otros livianos es un tema que yo personalmente todavía no sé dónde tirarlo; lo dejo que se escurra, lentamente se forma una especie de “mantecol” y eso es lo que te mandamos al Ceamse, pero no está bien, entonces creo que ese es un tema importante a resolver. Si el 20% de los efluentes tienen cromo, ese 20% yo lo neutralizo por arriba del pH 8, lo pongo en un sistema de clarificación y saco un efluente sin cromo. Tengo el único barro con cromo que genero en la curtiembre. Creo que hay que pensar seriamente los procesos.
En la planta depuradora de líquido, si los barros no contienen ni cromo ni sulfuros, es un barro para ser escurrido y si uno quiere, hacer landfarming, volverlo al terreno o hacer un secado y puede ser usado para hacer fertilizantes o darle un destino cualquiera porque con el secado vamos a tener un sólido. No tenemos más un barro y que va a estar perfectamente estabilizado. Se genera un expeller que contiene pelo, porque cuando se trincha, parte del pelo se desprende y al hacer cebo y un expeller que tiene pelo, lo que hay que hacer es ponerle un hidrolizador al finalizar el proceso de rendering. Así se logrará un expeller de altísima calidad porque el pelo hidrolizado da unos valores enormes de digeribilidad. Hay quien dice que no puedo usar el pelo hidrolizado porque es negro, bueno decolorémoslo con agua oxigenada.
Finalmente todo lo que son recortes, virutas y demás, hay que descurtirlos y hacer una proteína y un resto que, probablemente puede ir a cromo recuperable para el proceso y si no irá a la planta de efluentes. Para mí el tema del descurtido es fundamental porque no es tan difícil y tiene utilidad sin hablar de que hay empresas que lo están utilizando haciendo pingües negocios.
Ing . Jorge Garda